"[...] Nunca pude hacerle confidencias ni pedirle ayuda alguna. A veces, como un perro sin pedigrí y muy dejado de la mano de Dios, siento la pueril tentación de escribir negro sobre blanco y con todo detalle cuánto me hizo padecer con su dureza y su inconsecuencia. Me callo. Y se lo perdono. Todo queda tan lejos ya..."
"Hipótesis: todos los cuerpos, masculinos y femeninos, aspiran según un principio de modalidades confusas a los reencuentros con estas voluptuosidades primitivas, a esos momentos en los que la vida despunta, y triunfa exclusivamente la fuerza de las potencias vitales".
"Irás naciendo poco / a poco, día a día. / Como todas las cosas / que hablan hondo, será / tu palabra sencilla. / A veces no sabrán / qué dices. No te pidan / luz. Mejor en la sombra / amor se comunica. / Así, incansablemente, / hila que te hila".
"Como se dice en Norteamérica: ser diferente es indecente. La masa arrolla todo lo diferente, egregio, individual, calificado y selecto. Quien no sea como todo el mundo, quien no piense como todo el mundo corre el riesgo de ser eliminado. Y claro está que ese 'todo el mundo' no es 'todo el mundo'. 'Todo el mundo' era, normalmente, la unidad compleja de masa y minorías discrepantes, especiales. Ahora todo el mundo es sólo la masa".
"Lo que se da es idéntico a lo que no se da, lo que descartamos o dejamos pasar idéntico a lo que tomamos y asimos, lo que experimentamos idéntico a lo que no probamos, y sin embargo nos va la vida y se nos va la vida en escoger y rechazar y seleccionar, en trazar una línea que separe esas cosas que son idénticas y haga de nuestra historia una historia única que recordemos y pueda contarse".
[...] "Quería escribir acerca de su viaje, de lo bueno y lo malo de partir, de aquel indigno y peligroso amor por uno mismo que hay en la nostalgia y en el deseo de volver y que, como todo amor por uno mismo, nos esclaviza. Este viaje no será una fuga, partir es morir un poco, también vivir, ser, estarse quieto. Serán los miedos, las ambiciones, las metas que hay que ahuyentar y desvanecer".
[...] "Mientras que, de los otros amanuenses podría escribir toda su vida, nada similar se puede hacer con Bartleby. Creo que no existe material para escribir una biografía completa y satisfactoria de este hombre. Es una pérdida irreparable para la literatura. Bartleby era uno de esos seres sobre los que no se puede asegurar nada, excepto a partir de las fuentes originales, y, en su caso, son muy escasas. Todo lo que sé de Bartleby es lo que vieron mis ojos atónitos, excepto un vago informe que aparecerá en el epílogo".
"Mientras no oigas que con claridad se eleva dentro de ti una voz entre el moscardoneo generalizado, una voz que te permita diferenciar limpiamente ecos y voces, persistirán los desasosiegos. Hasta que no la oigas, navegarás derivando -parece obligado. Pero, te dices, el día aquel en que nítida brote de entre los ecos, tu espera habrá terminado: el tuyo volverá a ser, tal vez como antaño, un Mundo- tus ojos, tus oídos crearán eternidad".
"Me he visto diciendo muchas otras cosas sobre la poesía, pero la principal de todas es que es metáfora, decir una cosa y querer decir otra, el placer de lo ulterior. La poesía está hecha simplemente de metáfora. También la filosofía, y la ciencia, ya que estamos, si me permiten esta pequeña enmienda a la totalidad, viniendo de un amigo. Cada poema contiene una nueva metáfora o, en otro caso, nada. Y, en cierto sentido, todos los poemas son siempre la misma vieja metáfora".
"Distintos diseños estimulan distintos potenciales de la naturaleza humana. Nuestros esfuerzos no deberían estar dirigidos a lograr que la mentalidad de rebaño sea lo más eficiente posible. En cambio, sí deberíamos tratar de inspirar el fenómeno de la inteligencia individual.
¿Qué es una persona? Si supiera la respuesta, podría programar una persona artificial en un ordenador. Pero no puedo. Una persona no es una fórmula fácil, sino una aventura, un misterio, un salto hacia la fe".
"Todos nos inventamos historias diversas (que en el fondo son siempre la misma), para imaginar que nos ha pasado algo en la vida. Una historia o una serie de historias inventadas que al final son lo único que realmente hemos vivido. Historias que uno mismo se cuenta para imaginarse que tiene experiencias o que en la vida nos ha sucedido algo que tiene sentido. Pero ¿quién puede asegurar que el orden del relato es el orden de la vida? De esas ilusiones estamos hechos, querido maestro, como usted sabe mejor que yo".
"En alguna parte dentro de nosotros -le pareció oír- todo, siempre, es aquí y ahora. No fluye lo pasado, se estanca, se detiene y se fija con perfiles clarísimos y en el momento preciso (ese instante cuya elección nada tiene que ver con la voluntad o el deseo) surge para salvar o condenar a la persona dentro de la cual se alberga. Medroso de revelaciones que presentía, intentaba descabalar, empañar los recuerdos".
"Una infancia nueva, un ama vieja otra vez, y una cama pequeña donde acabe por dormirme, entre cuentos que arrullan, mal oídos, con una atención que se pone tibia, de rayos que penetraban en jóvenes cabellos rubios como el trigo... Y todo esto muy grande, muy eterno, definitivo para siempre, de la estatura única de Dios, allá en el fondo triste y somnoliento de la realidad última de las cosas..."
"Cuando muere, todo el mundo debe dejar algo detrás, decía mi abuelo. Un hijo, un libro, un cuadro, una casa, una pared levantada o un par de zapatos. O un jardín plantado. Algo que tu mano tocará de un modo especial, de modo que tu alma tenga algún sitio a donde ir cuando tú mueras, y cuando la gente mire ese árbol, o esa flor, que tú plantaste, tú estarás allí".
"-Se escribe y se lee poesía, no porque sea bonita, sino porque formamos parte de la Humanidad. Se escribe y se lee poesía porque los seres humanos son seres con pasiones. La Medicina, el Derecho, el comercio, son nobles actividades, necesarias todas ellas para mantenernos con vida. Pero la poesía, el amor, la belleza, ésa es nuestra razón de ser".
"Tienes que hallar el camino de vuelta a tu cabeza, a sus tempestades, auroras boreales e incendios. Basta ya de esa civilidad inveterada en la que no cesas de congratularte de estar vivo. ¿Lo estás realmente? ¿Aprendes? ¿Haces algo? ¿Te golpeas hasta sangrar?"
"La mayoría de nosotros somos conscientes de que las preguntas que nos hagamos van a condicionar nuestra vida, pero se nos olvida (o no somos conscientes de) que las preguntas que hagamos a los demás también van a condicionar las suyas. Si quieres influir en el comportamiento de alguien o en su opinión, no le digas lo que tiene que hacer, o qué pensar, simplemente hazle una pregunta para que contemple otras posibilidades por sí mismo y déjalo que decida..."
"Nunca creeré que los poderosos, los políticos y los capitalistas sean los únicos responsables de la guerra. No, el hombre común y corriente, también se alegra de hacerla. Si así no fuera, hace tiempo que los pueblos se habrían revelado".
"La profesora premió mi ejercicio de redacción haciéndome leerla en alto. Es posible que este gesto decidiese mi futura profesión. Sin embargo, en realidad era más bien en los momentos en que escribía los ejercicios de redacción cuando aparecía sin previo aviso esa fuerza liberadora que le da a uno la escritura: brinda la posibilidad de entrar en lugares en los que no se puede entrar en la vida real, de acceder hasta en los espacios más prohibidos. E incluso me hace posible más que eso: llevarme allí a mis invitados".
"Frente al mundo se pueden tomar dos actitudes: uno puede declararse a favor de los silenciosos escépticos y cínicos, que, alegremente, se dedican a desdeñar los fenómenos de la vida y gustan de reducirla a sus ingredientes más menudos, evidentes y aun banales. O bien -segunda opción- puede aceptarse la posibilidad de que las cosas grandes e invisibles existen de vereda y, sin caer en la exaltación vana ni en la retórica insufrible de los predicadores ambulantes, intentar expresarlas o, al menos, rendirles homenaje, lo que, por lo demás, no significa en absoluto que entonces vaya uno a cerrar los ojos a todo lo pequeño y bajo".
"Creo que para completar lo que es real es necesario persuadirse o imaginarse de vez en cuando alguna cosa; en otras palabras, nuestras fantasías son tan reales como lo son nuestras otras realidades. El sentimiento no es menos real que el intelecto. He aquí un hecho que debería saltar a la vista a la velocidad del rayo".
"[...] Sin esas precursoras, Jane Austen y las Brontë y George Eliot no hubieran escrito, como no lo hubiera hecho Shakespeare sin Marlowe, o Marlowe sin Chaucer, o Chaucer sin aquellos poetas olvidados que trazaron el camino y domesticaron la rudeza natural del idioma. Porque las obras maestras no nacen aisladas y solitarias; son el producto de muchos años de pensar en común, de pensar en montón, detrás de la voz única, de modo que ésta es la experiencia de la masa".
"El autor sólo dispone de las palabras, cada página es su última oportunidad. Con las frases él puede, sí puede, sumergirse en los éxtasis grises de su actualidad cotidiana, éste es su único y auténtico experimento, y la autoridad que puede tener sólo la recibe de sus epifanías de lo cotidiano; produce revelaciones palabra a palabra, los lectores las tienen delante de sus narices: la misma cotidianidad es el abismo, el lenguaje es su excipiente [...] Los dados se lanzan cuando nuestros autores se aprestan a escribir ese género de frases que confieren valor constituyente a lo que habitualmente es invisible".
"En las altas horas / de la madrugada, / hay un lector insomne / que se abstrae en el grillo. / Y el grillo canta y canta. / Hipnosis del despierto ensimismado / en una santidad / de nada".