La elegancia del erizo

La elegancia del erizo es la segunda novela de Muriel Barbery, con la que alcanzó un notable éxito de ventas a la vez que cosechó buenas críticas.

Nos habla de la personalidad, reflexiones y relaciones entre unos personajes muy especiales: Renée, una portera de mediana edad aparentemente simple pero muy inteligente y de rica vida interior y Paloma, una niña de 12 años superdotada que rechaza el mundo de los adultos. Después se incorpora Kakuro Ozu, un japonés capaz de escuchar a los demás al que no le importa el qué dirán.

Los tres son vecinos y entre ellos crece una intensa amistad que germina gracias a aspectos comunes, ideas y sentimientos que comparten. Son personas aparentemente normales y vulgares, que conforme las vamos conociendo nos muestran su complejidad. Descubrimos que sufren por sentirse profundamente inadaptadas en la sociedad, se niegan a aceptar la gran hipocresía que impera, el materialismo, la falta de espiritualidad, de sensibilidad, padecen por la dificultad de alcanzar la felicidad en estas condiciones.

La portera es una mujer que en un primer contacto se presenta desagradable, negativa, que defiende su alma del exterior mostrando sus "pinchos", como haría un erizo. Sin embargo encuentra su salvación en la literatura, la pasión por los libros son su mejor medicina para reencontrarse con el sentido de la vida que había perdido.

La inteligente niña es capaz de penetrar en esta plenitud interior y percibir la "elegancia del erizo", símbolo del personaje de Renée, aunque incapaz de soportar su propio sufrimiento y soledad. El japonés aparece para dar luz y dar esperanza a sus existencias.

Muriel Barbery con este libro nos ofrece un pretexto perfecto para reflexionar sobre el sentido de la vida, la filosofía como herramienta de vida o los valores de la sociedad occidental. También nos introduce en la cultura japonesa que dirige su búsqueda de la belleza hacia lo más pequeño y efímero... En definitiva, conocernos mejor y mostrarnos algunas sendas por las que podamos encaminarnos hacia la felicidad.