Eduardo Mendoza
Biografía: Eduardo Mendoza nace el 11 de enero de 1943 el Barcelona.
Es licenciado en Derecho y ejerció como abogado durante una temporada. Tras unos años abandona su país y su trabajo para trasladarse a Nueva York como traductor de la ONU, probablemente como dice él mismo porque "España en aquellos años era triste, amarga y violenta".
En 1975 escribe "La verdad sobre el caso Savolta", su primera novela, que inicialmente no está muy bien vista por la censura franquista. Pocos meses después muere Franco y su libro se convierte en la primera novela considerada como representante del cambio que iba a producirse hacia la transición democrática. El año siguiente recibió el Premio de la Crítica.
Colaboró escribiendo para periódicos como "El País". También ejerció de profesor en la Facultad de Traducción e Interpretación de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. Este autor ha sido reconocido con importantes premios literarios además del citado Premio de la Crítica, como el Premio Ciudad de Barcelona, el Premio Planeta o el Premio Cervantes 2016.
En la personal forma de escribir de Eduardo Mendoza es llamativa su capacidad para parodiar y reducir al absurdo todo tipo de situaciones, dando lugar a increibles escenas surrealistas cargadas de ironía, de un humor tan exacerbado que alcanza el paroxismo. El libro que supuso su consagración como figura crucial fue "La ciudad de los prodigios", escrita en 1986.
Curiosidades: - En la década de los 80 trabajó como intérprete, curiosamente tuvo que desempeñar este papel entre Felipe González y Ronald Reagan.
- Eduardo Mendoza se atrevió a ilustrar "La visión del Archiduque", una novela satírica escrita por él mismo. Sus ilustraciones estaban a mitad camino entre el dibujo y la caricatura.
- Varias de sus novelas han sido llevadas al cine, como "El año del diluvio" o "La ciudad de los prodigios".
CITAS, FRASES, DECLARACIONES Y POÉTICA: - "Tengo pocos libros porque una vez leídos los regalo. Salvo que sea algo muy bueno, o un libro que sé que voy a querer consultar, o bien porque sea de un amigo. Lo único que releo permanentemente es la Biblia".
- "Básicamente uno escribe porque quiere escribir. ¿Para quién? Para el libro, para que quede bien. Yo en realidad escribo para justificar mi presencia en el mundo".
- "Antes todo el mundo sabía lo que es leer, como todo el mundo sabe lo que es la pintura o la música; la gente sabía lo qué era la literatura y hoy no. Se toma como una forma de conocimiento, de información, por eso la novela histórica, o de entretenimiento, pero la literatura es otra cosa".
- "No soy un testigo privilegiado. No dispongo de más información que la que veo, la que oigo y la que leo, como el resto de los ciudadanos. Luego, como novelista, intento describir, no analizar. Desde luego, Barcelona, como toda comunidad urbana, es compleja. No cabe en un libro. Lo que sí cabe es una propuesta de reflexión y unas imágenes sueltas que, en le mejor de los casos, forman un paisaje, no un atlas".
- "Siempre planifiqué todas mis actividades como una forma de sobrevivir y poder seguir escribiendo".
- "Nunca me he planteado el hecho de escribir como algo que dependiera de mi elección"
- "La fantasía supongo que es una cosa mucho más independiente de la realidad. En cambio, la imaginación es la mutación a partir de la realidad. De modo que me quedo con la imaginación, naturalmente. Siempre necesito un punto de partida y uno de llegada. La pirueta de la imaginación no me interesa".