Mathias Énard
Biografía: Mathias Énard nació en Niort (Francia) en 1972.
La trayectoria de este escritor, periodista y traductor francés ha sido reconocida por la crítica especializada y su obra ha obtenido importantes galardones, consolidándose su autor como una de las plumas francesas contemporáneas a tener en cuenta en el panorama literario actual.
Énard cursó estudios de árabe y persa y pasó largas estancias en Oriente Medio, adoptando por último la ciudad española de Barcelona como residencia. En la Universidad de Barcelona ejerce de profesor de árabe hasta 2009 y desarrolla a su vez proyectos con varias publicaciones culturales, colaborando entre otras con la ya extinta revista Lateral. Miembro del consejo de readacción de la revista Inculte en París, en 2005 fue elegido escritor residente en Villa Médicis (Roma).
Mathias Énard es autor de las novelas "La perfección del tiro", "Remontando el Orinoco", "Manual del perfecto terrorista", "Zona" (ganadora del premio francés Décembre), "Habladles de batallas, de reyes y elefantes" (obra ganadora del prestigioso Premio Goncourt des Lycéens 2010), "El alcohol y la nostalgia" y "Calle de los Ladrones", novela que obtuvo el premio Liste Goncourt/ Le Choix de l'Orient, resultando además finalista del premio Goncourt 2012.
Curiosidades: - Mathias Énard reconoce como maestros suyos a escritores como Pierre Michon, Thomas Bernhard, Javier Marías, Raymond Carver, Danilo Kis, Celine, Burroughs o Miodrag Bulatovic, escritores a los que admira profundamente.
CITAS, FRASES, DECLARACIONES Y POÉTICA: - "La novela por un lado ha de entretener al lector y ofrecerle historias estimulantes, pero por otro lado también debe tratar temas serios y profundos, como el amor y las relaciones. Creo que eso es lo que distingue la buena de la mala literatura".
- "Creo que el arte tiene el papel de mediar entre las diferencias, de proponer una forma de entender al otro. La literatura y el arte visual son una gran manera de conocer al otro y de reflexionar sobre nuestras diferencias".
- "Cada obra te lleva a una forma de escribir, cada historia debe ser escrita de una forma distinta".
- "Hay que aceptar las diferencias y entenderlas para poder comunicarnos. No se pueden negar las diferencias, pero tampoco el hecho de las diferencias impediría la comunicación o la convivencia. Para ello hay que conocer y reconocer la alteridad".
- (Sobre "Calle de los Ladrones"): "Una identidad nos limita a un adjetivo, a una nacionalidad, a un pueblo, cuando existen en nosotros decenas de variables. Esa pluralidad es una forma de luchar contra la uniformidad a la que lleva la religión. Los musulmanes no sólo son musulmanes, son más que seres humanos que profesan un credo. Ladjar es un ejemplo peculiar de cómo uno puede ser todo un mundo".