Maria Van Rysselberghe
Biografía: Maria Van Rysselberghe nace en Bruselas en 1866.
Perteneció a una familia culta ligada al mundo del arte belga. Se casó con el pintor Theo Van Rysselberghe y fue la amiga más próxima de André Gide, el cual la bautizó cariñosamente como la "Petite Dame".
Bruselas y París fueron las ciudades de esta autora y fue en París donde acabó instalándose definitivamente, en la Rue Vanneau, en un apartamento colindante al de su amigo Gide, el cual tuvo una relación con su hija Elisabeth de la que nacería una niña.
Esta fascinante y poco prolífica escritora nos dejó al menos tres textos fundamentales: "Para un ruiseñor", "Hace cuarenta años" y "Galería privada", así como también los "Cuadernos de la Petite Dame", una selección de notas sobre la historia auténtica de André Gide, que retratan a su vez toda una época de la literatura francesa y europea.
Maria Van Rysselberghe murió en Cabris, Alpes marítimos, en 1959.
Curiosidades: - Maria y Theo tuvieron una hija en común llamada Elizabeth Van Rysselberghe. Curiosamente, Elizabeth es madre de Catherine, la única hija que tuvo André Gide, que por otra parte era homosexual y permaneció felizmente casado con su esposa Madeleine durante toda su vida.
- Theo Van Rysselberghe pintó a su mujer Maria en numerosas ocasiones. En las imágenes que incluimos a continuación se pueden ver una muestra de estos retratos.
CITAS, FRASES, DECLARACIONES Y POÉTICA: - "No dejemos que nada se pierda, ni de nosotros ni de la vida; aceptémosla tal y como viene; todo puede ser muy hermoso, hasta las lágrimas que nos guardamos de derramar..."
- "Hay que pensar lo que uno ama".
- "Preciosa memoria, más fuerte que los elementos destructores, que nos modelas con los reflejos que conservas, depósito sin fondo, lleno de incalculables resonancias, tú nos devuelves el espejo que recupera los instantes más fugaces".
- "El canto lo llevamos dentro de nosotros, nace de ese fecundo acorde del que nunca nos saciamos, que nunca se apagará y que seguimos descubriendo".
- "Apuntar alto es lo que nos vuelve modestos".
- ¡Qué poderosa es la obligación de ser quien se espera que seas!"
- "El engaño es una cuesta abajo sin posible vuelta atrás".