Harlan Coben, el maestro de la novela policiaca, pretende atraparnos en la lectura hasta altas horas de la madrugada con otra historia protagonizada por el peculiar detective Myron Bolitar.
La oferta que Coben nos propone en este caso no es nada despreciable, su novela "Alta tensión" fue la ganadora del IV Premio Internacional de Novela Negra RBA y sigue la línea de las anteriores. Este autor es todo un experto en conseguir que la atención del lector suba "in crescendo" según la trama va avanzando, sus novelas alcanzan y mantienen una acción trepidante llena de sorpresas y giros inesperados. Además en este caso se trata de un libro más elaborado y con más matices que los anteriores, con lo que el éxito está garantizado.
Myron Bolitar, representante de deportistas que por circunstancias ejerce como detective, se reencuentra en "Alta tensión" con Suzze, antigua tenista de éxito y aspecto de atractiva mujer fatal. Suzze es antigua clienta de Myron y acude a su despacho de Manhattan para solicitar su ayuda: su marido Lex Ryder, estrella del rock, ha desaparecido. Esta provocadora mujer, que en otra época formó parte de los sueños del detective, ahora se encuentra embarazada de ocho meses y piensa que los rumores que circulan por internet sobre la dudosa paternidad de su futuro hijo pueden ser los causantes de haber alejado a Lex de su lado.
Pero la vida de Myron Bolitar tampoco es fácil. Su padre Al se encuentra luchando entre la vida y la muerte en la cama de un hospital a causa de los imprevistos efectos devastadores de una mentira lanzada por Myron hace quince años. "La más fea de las verdades es preferible a la más bella de las mentiras" parece la conclusión lógica tras tener que enfrentarse a las consecuencias, pero a veces enfrentarse a la verdad es demasiado doloroso y complicado.
Las investigaciones de Myron se centran en averiguar la identidad de la persona que se ha dedicado a difundir el bulo en la red. Como es habitual, en el caso colaboran sus dos colegas y amigos Win (un elegante aunque letal multimillonario) y Esperanza Díaz (la socia de Myron, antigua ganadora de lucha libre y reina bisexual del mundo de la noche, ahora reconvertida a abogada y madre responsable).
Las averiguaciones que realizan van destapando oscuros secretos de los protagonistas, antiguos fantasmas del pasado, heridas abiertas que nunca se llegaron a cerrar. El asunto más impactante es la desaparición de Brad, hermano del detective, sucedida hace mucho tiempo y que emerge de nuevo, removiendo y desestabilizando su mundo interior.
Como declara The Independent, "Las tramas de Coben son siempre ingeniosas, pero ello nunca es tan importante como la confusión emocional en que se sumergen sus personajes ante lo que les sucede o ante lo que hacen". The Telegraph opina: "En las novelas de Coben, nunca sabes quién es bueno y quién es malo: algo sucede en las últimas páginas que te acaba trayendo de cabeza". Por algo será que a este escritor ya lo han leído más de 47 millones de personas y se ha consolidado como uno de los referentes en la novela negra de los Estados Unidos.