Arcángel postal
Edna Aponte
"Medio cuerpo asoma, y sus alas quedan plateadas completamente aladas, la espada flamígera apunta y la mano libre señala, San Michel de Brulleles, viajé para verlo, solamente para mirarlo de cerca y reconocer su espada plateada, tal como la había soñado." Me dice que fue a Moscú y de allí a Bruselas.
Estas alas y su espada le protege desde entonces, Rosa de los vientos se siente a su amparo porque su mano dice detente, y el mal se arrepiente, se desvanece, fue tan claro que al atravesar en ese tren donde casi sucumbe, dice que bajó una estación antes donde él la esperaba. Y a unos km más el tren se desmoronó ante las llamas.
(Ficción postal: POSTALES PARA UNA MALETA, de Edna Aponte).
PUBLICA Envía tus textos libres aquí