No dejes nunca de ser tú.

Una manera diferente de escapar del tedio y la monotonía es dejarse llevar por la imaginación y salir a descubrir nuevos horizontes, donde la chispa de la curiosidad se enciende para ti.
Busca un lugar que te haga sentir libre de toda atadura, de obligaciones y compromisos, donde la sonrisa te lleva a disfrutar momentos mágicos, únicos e irrepetibles.
Tu lugar será el refugio de la sinceridad, la cueva de la vida y el valle de la confianza.
No dejes nunca de sonreír porque en la risa está la verdadera felicidad, la razón que define el cariño hacia lo sencillo, la empatía en la amistad y la caricia hacia lo natural.
No dejes nunca de amar, porque el amor es el latido del corazón que te permite saborear los placeres del sentimiento, del cariño y la felicidad.
No dejes nunca de ser tú, en toda su extensión y en todos y cada uno de sus defectos y virtudes, porque en ti está la pureza y la razón de tu maravillosa existencia y porque eres único en un mundo hecho para ti, para vivirlo y sentirlo como tú quieras.

El lugar ideal está donde tú te encuentras, ese mágico espacio que ocupas brillando, iluminando el universo de amor, color y felicidad.

Rafael Vallejo Vela.