Hoy en día, en plena era digital, nadie duda de que los verdaderos avances de nuestros tiempos vienen de mano de la informática. La tecnología al servicio de la informática ha revolucionado los medios de comunicación, el mundo del cine, el periodismo y, lo más importante, está cambiando nuestro modo de vida. Nuestra forma de relacionarnos, de escuchar música, de buscar información... aparatos como el iPod, el iPhone y el iPad están influyendo en nuestros hábitos cotidianos y su uso se impone entre las nuevas generaciones.
El denominador común de estos inventos digitales es Steve Jobs, impulsor y cerebro de Apple. Pero, ¿era Steve Jobs un genio, un visionario? Conocer mejor al hombre servirá para desentrañar el secreto de su magia.
Walter Isaacson fue el elegido para reconstruir su biografía, autorizada por el propio Steve Jobs, que no exigió ningún control sobre el libro y alentó a las personas de su entorno a hablar con sinceridad. Isaacson, tras realizar más de 40 entrevistas a Jobs y unas 100 más a sus allegados, presenta el retrato de uno de los personajes más relevantes de la era actual.
Su historia comienza cuando es dado en adopción. Jobs era hijo de un inmigrante sirio, al que no conoció jamás. Tuvo una vida muy agitada; dejó embarazada a su novia a los 23 años, una etapa de su vida de la que no se siente orgulloso. Fue co-fundador de Apple, acabó siendo expulsado de la empresa y al cabo de unos años volvió a estar al mando de ella.
En octubre de 2003 es sorprendido por el cáncer de páncreas, enfermedad contra la que luchó atacando desde varios frentes, empezando con una dieta vegetariana, limpiezas intestinales e hidroterapia, sometiéndose después a cirugía y quimioterapia y con una exhaustiva investigación genética después, que consiguió aislar y actuar directamente sobre sus vías moleculares defectuosas. Su lucha fue infructuosa y en octubre de 2011 fallecía, a los 56 años de edad.
La personalidad de Jobs muestra matices distintos según los entrevistados; algunos eran seducidos por su ímpetu y arrastrados por su ilusión, otros se veían afectados por su obsesión de controlarlo todo y su carácter exigente, aunque todos coinciden en que no dejaba indiferente a nadie.
Finalmente, la receta de su éxito parece compuesta por la combinación de varias cualidades: imaginación, inteligencia, tesón, pasión y perfeccionismo. Cualidades que manejaba hábilmente, siguiendo un método de trabajo innovador: fusionar su gran creatividad con la última tecnología. Dar forma real y palpable a las ilusiones, en otras palabras, poner la magia al alcance de nuestras manos.
Curiosidades: - Walter Isaacson, autor de "Steve Jobs. La biografía definitiva", se encargó también de redactar las biografías de personajes tan relevantes como Einstein, Franklin y Kissinger.