"Eras una muñeca que flotaba ingrávida cuando logré introducir tu cuerpo en el agua jabonosa. Tu pelo largo, ya liberado, parecía cobrar vida y se movía suavemente, mecido por mi mano, que comprobaba la temperatura del agua para que no te enfriases. Tu cuerpo irradiaba una palidez virginal, casi adictiva. No eras bonita en ese momento, pero sabía que lo serías, que él iba a lograr que fueras tal y como estabas instalada en su mente. Te modelaría como arcilla a su antojo, sacando de ti la belleza, la inocencia o incluso la más exagerada sensualidad. Serías otra persona en sus manos".
Un pintor que no descansará hasta lograr su mejor cuadro. Una musa que de repente deja de serlo y se resiste a ello como puede. Y una chica que corre cada día para huir de un hecho atormentado de su pasado reciente. Sobre este triángulo gira la historia de "
En la noche de los cuerpos", una novela sobre los tortuosos caminos por los que puede llevar a una persona la obsesión, sobre el peso de la culpa y la oscuridad de los procesos creativos.
La historia arranca con un secuestro que marca un antes y un después en la relación de los protagonistas. Tiempo después, conoceremos la historia a través de la confesión de
Cecilia. Una confesión intensa y desgarradora con lagunas y recuerdos borrosos, en la que presente y pasado se mezclan para contar cómo
Olivier toma la decisión de secuestrar a
Laia, una completa desconocida en quien cree haber encontrado la musa que siempre ha buscado. Su obsesión por esta chica los conduce a un callejón del que resultará casi imposible salir.
Cecilia, pieza fundamental en el secuestro, es el eje sobre el que bascula la narración. Las dudas, el miedo e incluso las certezas más grandes de su testimonio ilustran la opresiva relación que se establece entre los tres durante el secuestro.
Su lealtad a Olivier, el deseo de permanecer junto a él cuando todo se ha desmoronado conduce a dos de las preguntas fundamentales del libro: ¿Hasta dónde puede llegar una persona por amor? ¿Cuál es el límite que separa la genialidad de la locura?