"La vida es una sombra tan sólo, que transcurre; un pobre actor que, orgulloso, consume su turno sobre el escenario para jamás volver a ser oído. Es una historia contada por un necio, llena de ruido y furia, que nada significa".
Shakespeare escribió este fragmento de "
Macbeth" al final de la obra, haciendo referencia a la vida corrompida y carente de principios que llevó su protagonista, al dejarse dominar por la maldad y los bajos instintos. El párrafo llamó la atención de
William Faulkner, que decidió tomarlo prestado para el título de su obra cumbre "
El ruido y la furia".
La novela de
Faulkner relata la sórdida historia de los cuatro
hermanos Compson, hijos de una madre desquiciada y de un padre alcohólico. El hermano menor es
Benjy, padece cierto retraso mental;
Quentin es el más inteligente aunque también el más débil psicológicamente, enamorado para siempre de su encantadora hermana
Caddy;
Jason, materialista y amargado, contribuye con sus actos mezquinos a aumentar la desgracia de la familia.
William Faulkner sabe que los hechos siempre toman un cariz distinto al pasar por el filtro de la personalidad de cada individuo, su gran logro es plasmarlo a la perfección en "
El ruido y la furia". La novela se divide en
cuatro partes, que juntas completan la visión de la historia.
La voz de
Benjy en primera persona inicia una narración llena de incoherencias cronológicas y de gran confusión, propia de quien no es capaz de entender con claridad los acontecimientos. Le sigue
Quentin, que trata de explicar con los pensamientos inconexos que se suceden en su mente torturada su relación con
Caddy. Su hermana, por la que siente algo más que un amor fraternal, quedó embarazada de un chico y para resolver la situación decidió casarse con otro hombre, que la repudió cuando se enteró de que la hija que tuvo no era suya. En la tercera parte es
Jason el que narra con cínica frialdad las injusticias que comete con
Quentin,
hija de
Caddy y sobrina suya. Por último, en la cuarta sección de la novela interviene
Dilsey, una sirviente de color que siempre ha trabajado para los
Compson y asiste a la decadencia de esta familia.
En "
El ruido y la furia"
Faulkner cede su papel de narrador a tres de los protagonistas de la trama y a una observadora implicada en ella, imprimiendo así a la novela un tono casi cinematográfico, con saltos en el tiempo y en la trama; se convierte así en un adelantado a su tiempo e innova rompiendo con la narración lineal, que era la usual hasta el momento.
Aunque las
cuatro voces narrativas forman un todo, tal vez la de
Benjy parezca oirse por encima de las otras tres, gritando con
ruido y furia en un intento inútil de escapar de una historia autodestructiva a la que no encuentra significado alguno.