En la España de 1720, una joven educada y culta hija de un médico ilustrado se ve obligada a ganarse la vida tras la muerte de su padre en la guerra trabajando como cocinera. De este modo, Clara mitiga la pobreza a la que las circunstancias le abocaron mientras desarrolla su gran pasión por la cocina, afición que su madre le ha transmitido y que significa para ella mucho más que una obligación.
Haciendo uso de una recomendación consigue entrar como oficial de cocina en la gran casa del duque de Castamar, una noble mansión propiedad de don Diego, grande de España, que habita en ella junto a su hermano negro y un ejército de sirvientes del que ahora Clara forma parte. Pero, a pesar de ser una magnífica cocinera capaz de preparar manjares exquisitos de sabor inigualable, Clara cuenta con la desventaja de padecer una enfermedad mental poco habitual y menos comprendida: la joven padece de agorafobia, lo que le impide bajo cualquier circunstancia enfrentarse a los espacios abiertos.
La vida para Diego tampoco es fácil, a pesar de gozar de una posición social privilegiada. El noble se limita a atender a sus obligaciones acosado por la pena que todavía le produce la muerte de su mujer, acaecida diez años antes. Le es imposible olvidar a Alba, ese ser maravilloso con el que tuvo la suerte de compartir su vida y que un accidente fatal le arrebató.
Poco sospecha Diego que la llegada de Clara a Castamar va a convocar a un huracán de sentimientos y circunstancias que descolocará por completo su vida y las vidas de la gente que le rodea, poniendo incluso en jaque su posición y el ducado de Castamar. Un huracán que se inicia a modo de suave brisa entre Diego y Clara "compartiendo un lenguaje secreto de aromas y sabores, sujeto a los detalles, a lo pequeño e invisible que atrapaba los sentidos" y que deriva en una batería de conjuras, engaños, amores ilícitos, lances de espada y lances de alcoba en la sofisticada corte española del siglo XVIII, en un momento en el que "las intrigas serpentean sigilosas hasta que es tarde para evitar las consecuencias".
"La cocinera de Castamar" no es solamente una hermosa historia de amor imposible entre un noble y alguien que "no pertenece a este mundo, sino que está fuera de él". A lo largo de 764 páginas el lector se introducirá en las intrigas de la Corte al más puro estilo de "Las amistades peligrosas" sucediéndose las historias de venganza, vanidad y poder; participará de los juegos de seducción, sensualidad y misterio de personajes llenos de luz y de oscuridad; vibrará con la acción vertiginosa de las clásicas novelas de aventuras y participará de la mirada de personajes oprimidos que no han tenido voz a lo largo de la historia (mujeres y personas de color), disfrutando al mismo tiempo de la fantástica ambientación y la deliciosa forma de narrar que ofrece Fernando J. Múñez.
Curiosidades: - "La cocinera de Castamar" es la primera novela de Fernando J. Múñez que, tras licenciarse en Filosofía y trabajar como realizador en publicidad, completó su formación estudiando Cinematografía en Estados Unidos. Ha dirigido varios cortometrajes y el largometraje "Las nornas", proyectado en el Festival de Alicante y la Seminici de Valladolid.