Manuel Vicent se inspiró en las vivencias y en la personalidad de Jesús Aguirre, el que fue duque de Alba, para elaborar su novela "Aguirre el magnífico". En ella retrata al protagonista además de esbozar el perfil de medio siglo de la Historia de España.
El autor aclara que no pretendió escribir una biografía, más bien se trata de un libro que refleja la vida novelada de este "grande de España". Vicent trató a Aguirre personalmente y en su narración trata de contar de manera informal y libre una historia que él conoce, que ha vivido. No pretende ser exacto, desarrolla la historia partiendo siempre de hechos reales y reconoce no haber necesitado utilizar demasiado la imaginación porque "Aguirre era de ficción, aunque existiera".
No se trata de un libro que busque el escándalo, el interés por parte del lector está garantizado simplemente con la aproximación a un hombre tan especial como fue Jesús Aguirre unido al buen hacer literario de Manuel Vicent.
La vida del personaje es atípica. Su nombre completo es Jesús Aguirre y Ortiz de Zárate. Hijo de madre soltera de la clase media-alta de Santander, recibió formación en Alemania para ordenarse sacerdote e incluso conoció al actual Papa Ratzinger. Era un sacerdote que cautivaba a autoridades de todos los signos políticos, adquirió popularidad gracias a sus sermones. Apasionado por la lectura desde niño, de adulto ejerció de director de la editorial Taurus. Fue nombrado Director General de Música. Colgó los hábitos y se casó con doña Cayetana Martínez de Irujo, con lo que entró por la puerta grande a formar parte de la nobleza convirtiéndose en el decimoctavo duque de Alba.
Este hombre se podría definir como un clérigo volteriano, intelectual, inteligente, mordaz y divertido. Un hombre de personalidad compleja, tremendamente culto, siempre rodeado de escritores de primer nivel, reputados teólogos, políticos y aristócratas. De gran determinación y ambición, según el autor una "rara avis", siempre sorprendente e inesperado.
Manuel Vicent hace gala de la sutileza y del buen humor que lo caracteriza en un equilibrio perfecto. El resultado es un libro que nos descubre a un personaje singular, que está plagado de referencias interesantes, de anécdotas tan auténticas como curiosas y que en muchas ocasiones resulta divertido.
Curiosidades: - Jesús Aguirre, durante una charla en presencia del Rey y del propio Manuel Vicent, le comentó a don Juan Carlos que este escritor iba a ser su biógrafo. De alguna manera ahora Manuel Vicent, aunque de manera póstuma, cumple con este encargo. Parece ser que el Rey en ese momento contestó: “Coño, Jesús, pues como lo cuente todo, vas aviado”.
- El autor además de sus propias experiencias también se ha basado para documentarse en testimonios de amigos del duque (sobre todo de Juan García Hortelano, amigo común de ambos).