Mujer de tierra y fuego. De paisajes agrestes y mares azotados por el viento. Indomable, un espectáculo en sí misma. Sencilla y terrible como una tormenta que se ejecuta según los dictados de su propia naturaleza. Animal salvaje. Pantera oscura de labios carnosos y ojos verdes. Espléndida yegua. Prieta Mula.
Mujer de instintos básicos e intuición pura. Ser de derroches, cataratas y volcanes. Hija de México, tapiz fantástico de violentos colores. Madre de México, maremágnum de esencias y culturas ancestrales. Mujer única. Mujer fuerte que mata y fascina, que hiere y atrapa. Mujer del "ni contigo ni sin ti", que lleva en sus venas a México en estado puro. "Imposible vivir sin esta mujer, imposible vivir sin este país".
Partió en busca de Diego Rivera con la intención de casarse con él y así superar a su hermana. El muralista, que desde su andamio se propone trasladar a pinceladas sus ideas comunistas para salvar a un México postrevolucionario, es el pintor más famoso y reconocido del momento en su país. Casarse con él supone para Lupe Marín adentrarse en el mundo artístico y brillar con una luz refleja.
Pronto el carácter de Lupe -el mayor de sus aliados, pero también el mayor de sus enemigos- le hará destacar entre el resto de mujeres, mucho más sumisas y acostumbradas a mantenerse en un discreto segundo plano. Pronto será también su carácter el que le alejará del paraíso vivido con Diego Rivera, dando paso a episodios de celos violentos y a cierta incapacidad para disfrutar de su maternidad.
Su segundo matrimonio, esta vez con el poeta y crítico Jorge Cuesta, la mantiene ligada al mundo del arte. De distinta ideología a su primer marido, la relación con Cuesta le conduce hacia un círculo cultural diferente. De nuevo esta mujer, una fuerza de la naturaleza de origen humilde y sin estudios, no deja a nadie indiferente y su arrolladora personalidad provoca y cautiva a escritores, intelectuales y pensadores. Lupe Marín, sin haber recibido formación ni poseer cultura, es una mujer controvertida que levanta pasiones y se integra en los círculos artísticos más influyentes del momento, brilla con luz propia y se convierte en una figura clave de la interesante época de ebullición cultural, artística y política que vivió México durante el siglo XX.
Elena Poniatowska, tras haberla entrevistado en persona en 1976, hablar en repetidas ocasiones con varios de sus familiares más cercanos y documentarse con una amplia bibliografía, nos ofrece en su novela "Dos veces única" un retrato de esta mujer increíble. Su vida es una historia que merece ser contada ya que, en palabras de Poniatowska, "Lupe Marín siempre fue una tierra vasta y fértil, a veces árida, otras tormentosa y despiadada, pero jamás plana. Conocerla es descubrir un aspecto recóndito de este terrible rompecabezas que es México".